martes, 25 de marzo de 2008

Los impuestos a las exportaciones agropecuarias, y sus implicancias

Argentina es un país ‘corto-placista’, y este tipo de impuestos es uno de los que atentan contra el agregado de valor a la producción primaria que se observa en muchos de nuestros países competidores. Ninguno de los principales competidores aplica impuestos a las exportaciones agropecuarias; ni los que subsidian (como la Unión Europea, EE.UU. o Canadá), ni los que no lo hacen (como Brasil, Australia, Chile y Nueva Zelanda)”. Si los países competidores, desarrollados o en desarrollo, no gravan la producción agropecuaria con impuestos a las exportaciones, ¿estarán todos equivocados?, o ¿habrán intentado generar sus recursos fiscales con otros impuestos menos distorsivos y con menor impacto en el crecimiento y en la distribución regional del ingreso?

7 comentarios:

Raul Arsuaga dijo...

muy interesante Martin. Gracias por tenerme en cuenta para enviarme tus comentarios. Un abrazo desde el Chaco.

Raul

Anónimo dijo...

Estimado Martin:
Sabes que coincido plenamente con vos y con las ideas de esta nota; y lo hago porque tube que emigrar a Capital Federal por falta de oportinudades de desarrollo profesional en nuestra provincia; espero y sueño como vos con una Argentina desarrollada y venturosa donde podamos pensar diferente y no seamos agredidos por ello.
Un Abrazo

Anónimo dijo...

Muy clara tu exposición, querido Martín.Sin conocer mucho el tema, comparto tu planteo y añado: excesivo el volumen de las retenciones y paupérrima la intención de reducir el gasto público, especialmente el generado por el mismo séquito gubernamental.
Un abrazo. Héctor

Anónimo dijo...

China aplica desde el pasado1 de enero un impuesto a la exportación de cereales, arroz y soja, en una horquilla que oscila del 5% al 25%. Rusia anunció de forma simultánea que subía casi cinco veces los impuestos a la exportación de cereales durante tres meses -de 22 a 105 euros la tonelada-, lo que alejará en la práctica sus producciones del mercado internacional.

http://www.nortecastilla.es/20080105/economia/elevados-precios-productos-agricolas-20080105.html

¿como es eso que nadie aplica impuestos a las exportaciones?

Martín dijo...

Estimado lector, el artículo del Dr. Regúnaga (mas que un entendido en la materia) NO dice que nadie aplica impuestos a las exportaciones, lo que dice es: "que ninguno de los principales competidores" lo hace.

Además, estimado lector ¿le parece que Rusia y China son modelos de Repúblicas representativas exitosas, prósperas y liberales que deberíamos tomar como ejemplo para saber si respetamos o no nuestra Constitución?
¿No deberíamos mejor mirar lo que hacen EEUU, la UE o Nueva Zelandia?
Mas allá de lo acertado o equivocado de un impuesto en particular, lo esencial es que este impuesto NO debería existir, dado que es doblemente inconstitucional. A pesar de la manipulación de los jueces por parte del aparato k, ya hay fallos judiciales que empiezan a expedirse en dicho sentido
(https://www.lanacion.com.ar/politica/nota.asp?nota_id=1016393&pid=4506111&toi=5823)

Anónimo dijo...

Hola gracias por la nota, visito la argentina y no entendia bien que se discutia tanto. Vivo hace 20 años en un pais con impuestos a las rentas y gran disciplina fiscal cosa que aca no veo. Quizas estas retenciones tengan sentido por un tiempo (el pais esta muy mal en muchios aspectos sociales y de infraestructuras) pero puedan ser reemplazados de a poco por impuestos a las personas fisicas, patrimonio y activos financieros, aunque eso tambien recibira impugnaciones y protestas: mi experiencia me dice que nadie quiere pagar en ningun lado.

Martín dijo...

Estimado Pablo Luis, gracias por tu comentario.
Creo que Argentina está mal (entre otras cosas) justamente por los impuestos, expresión de este estilo populista y demagógico de gobierno. En este caso además, forman parte de una creciente inseguridad jurídica (ya que se hicieron violando la letra expresa de nuestra constitución).
Claro que en ningún país la gente quiere pagar impuestos, y eso está muy bien, nadie quiere que el estado le sustraiga con la excusa de re-distribuir (uno mismo redistribuye cuando ahorra, invierte o gasta). Los impuestos a los bienes personales, personas físicas, etc., son malos; ya que serían un doble impuesto. Son además injustos y nocivos para la economía y generadores de pobreza en el largo plazo. Pocos países exitosos en el mundo los usan, en general los impuestos deben deducirse de LA RENTA, no del ingreso, los bienes o el comercio.