martes, 23 de diciembre de 2008

El partido liberal

Un grupo de ciudadanos nos reunimos el 13 de diciembre en la Ciudad de Buenos Aires hasta pasado el mediodía, luego de un largo y fecundo intercambio de ideas, hemos resuelto que ha llegado el momento de formar un partido liberal que surja desde abajo. Queremos defender la Constitución, el Estado de Derecho, las libertades individuales, el derecho de propiedad, la República y el federalismo, la limitación al poder, la paz y el respeto, el pluralismo y la democracia. Y queremos hacerlo decididamente, en un nuevo partido político en el que se elijan los candidatos en internas abiertas y competitivas, sin personalismos. En este nuevo partido no hay ex ministros de economía, ni ex funcionarios, porque somos ciudadanos que nos venimos desarrollando en la actividad privada y que estamos profundamente preocupados por el deterioro institucional, social y económico que se está viviendo en la República Argentina. La convocatoria está abierta a todos los ciudadanos que quieran recuperar los ideales de la Constitución, para vivir en una Argentina próspera, libre y con más y mejores oportunidades para todos.

La pobreza funcional en Argentina

Un mundo que se cierra

Durao Barroso alertó sobre las medidas proteccionistas que se están tomando en varios países, que cierran sus fronteras al movimiento de personas y bienes. Quien haya leído un poco sobre la historia mundial del siglo XX, sabe qué ocurrió en los años treinta: se cerraron los mercados, se impusieron medidas proteccionistas, se aceleró el estatismo y el intervencionismo, empezaron a caer las democracias en Europa y, finalmente, se desembocó en la guerra mundial. Cuando los estados concentran más y más poder, sin que se lo limite constitucionalmente y se restringen las libertades individuales, se fortalecen las tendencias autoritarias y belicistas. Porque el ascenso al poder de persoanajes siniestros como Hitler, Mussolini, los régimenes ultraderechistas y el fortalecimiento de Stalin en la Unión Soviética no fueron hechos casuales. Un mundo en paz es un mundo abierto, dinámico, interrelacionado. Espero que los países europeos hayan aprendido la lección de los años treinta, para no repetir errores, que tanto dolor le causaron a la humanidad.
Ricardo López Göttig